MILONGA DEL SOLADADO POR JORGE LUIS BORGES
Lo he soñado en esta casa entre paredes y puertas. Dios les permite a los hombres soñar cosas que son ciertas. Lo he soñado mar afuera en unas islas glaciales. Que nos digan los demás la tumba y los hospitales. U na de tantas provincias del interior fue su tierra. (No conviene que se sepa que muere gente en la guerra.) Lo sacaron del cuartel, le pusieron en sus manos las armas y lo mandaron a morir con sus hermanos. Se obró con suma prudencia, se habló de un modo prolijo. Les entregaron a un tiempo el rifle y el crucifijo. Oyó los varios discursos de los vanos generales, que nos digan los demás la tumba y los hospitales. Oyó vivas y oyó mueras, oyó el clamor de la gente. Él sólo quería saber si era o no era valiente. Lo supo en aquel momento en que le entraba la herida. Se dijo: «no tuve miedo», cuando lo dejó la vida. Su mu...