Una página de EL QUILMERO que pretende recuperar para la memoria y difundir obras de autores de Quilmes y su región de influencia: narradores, poetas, ensayistas, dramaturgos, pensadores locales... y convocar a los grandes de las letras que nos llegan a la emoción. Chalo Agnelli
EL TUMULTO; ALFONSINA STORNI
Obtener enlace
Facebook
Twitter
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
"Me faltaba un
amor, y ya lo tuve, una infamia también y di con ella, un engaño y lo hallé; la savia sube
a copular mi vida en una bella rama cargada que pesarme siento y empiezo a madurar: estáte atento."
En los tiempos de la desinformación son muchos los textos que equivocadamente se atribuyen a escritores de prestigio internacional. Por ejemplo, de Gabriel García Márquez y no sólo con Gabo, ocurre lo mismo que con otros grandes escritores y pensadores de la historia de la humanidad: su fama aumenta a medida que transcurren los años, ya sea con una obra de su autoría o con textos ajenos que otros publican con su nombre. Estos últimos han pasado a conformar una nueva faceta del escritor colombiano: el ‘ Gabo apócrifo’, el ‘Borges apócrifo’, el “Cortázar apócrifo” ... Se trata de cuentos, poemas, refranes o cartas de despedidas que García Márquez, ni Borges, ni Cortázar nunca escribieron, pero que circulan por el mundo como si hubieran sido creados por ellos. Son una especie de bulos literarios que han engañado a más de un lector incauto. En esta era digital, donde las cadenas de WhatsApp y los correos electrónicos se propagan con una velocidad apabullante sin importar si lo que dic
" Fermina Daza estaba en la cocina probando la sopa para la cena, cuando oyó el grito de horror de Digna Pardo y el alboroto de la servidumbre de la casa y enseguida el del vecindario. Tiró la cuchara de probar y trató de correr como puedo con el peso invencible de su edad, gritando como una loca sin saber todavía lo que pasaba bajo las frondas del mango, y el corazón le saltó en astillas cuando vio a su hombre tendido bocarriba en el lodo, ya muerto en vida, pero resistiéndose todavía un último minuto al coletazo final de la muerte para que ella tuviera tiempo de llegar. Alcanzó a reconocerla en el tumulto a través de las lágrimas del dolor irrepetible de morirse sin ella, y la miró por última vez para siempre jamás, con los ojos más luminosos, más tristes y más agradecidos que ella no le vio nunca en medio siglo de vida en común, y alcanzó a decirle con el último aliento: - Sólo Dios sabe cuánto te quise." Gabriel García Márquez, de “ El amor en los tiempos del cóler
Doña Rata salió de paseo por los prados que esmalta el estío; son sus ojos tan viejos, tan viejos que no puede encontrar el camino. Demendóle a una flor de los campos: -guíame hasta el lugar en que vivo. Más la flor no podía guiarla con los pies en la tierra cautivos. Sola va por los campos, perdida; ya la noche la envuelve en su frío, ya se moja su traje de lana con las gotas del fresco rocío. A las ranas que halló en una charca Doña Rata pregunta el camino, mas las ranas no saben que exista nada más que su canto y su limo. A buscarla salieron los gnomos, que los gnomos son buenos amigos. En la mano luciérnagas llevan para ver en la noche el camino. Doña Rata regresa trotando entre luces y barbas de lino. ¡Qué feliz dormirá cuando llegue a las pajas doradas del
Comentarios
Publicar un comentario