PROSEMA A LOS ÁLGUIENES
Alguien
bebe agua de la fuente y le chorrea por la barbilla,
le moja la camisa.
Alguien besa a la mujer de sombrero rojo, que,
blanda, aprieta el brazo de su amante, enamorada.
Alguien entra en la sombra del templo con los dedos
humedecidos en la pila se persigna.
Alguien, adentro, musita un padrenuestro
desmemoriado, pero honesto.
Alguien hace malabarismo en la bocacalle, se le cae
un palo colorado con rayas verdes.
Alguien dormita en el banco de la plaza mientras un
gorrión se atreve a picotearle las miguitas del regazo.
Alguien enciende un cigarrillo y echa el humo hacia
el cielo.
Alguien pregona su mercadería de sopas paraguayas y
tortillas asadas.
Alguien observa el entorno buscando una presa fácil
para arrebatarle la cartera, el portafolio, la rutina o los sueños.
Alguien camina sin respiro, mirando el suelo,
ofuscado y torvo mientras habla con un aparatito negro que sostiene junto a su
oreja
Alguien, después de olfatear en varios árboles se
decide por un gomero copudo y levanta la pata como quién no quiere la cosa.
Alguien frena bruscamente frente a la anciana que
cruza distraída recordando a sus muertos.
Alguien. Álguienes. Todos.
El mundo se desparrama a voces, gesto humanos y de
los otros, como una granada.
Abigarrados y solos, repetidamente solos.
Leído en el "Encuentro de Autores" realizado por la Fundación Originarte el viernes 22 de noviembre de 2019.
chalo agnelli
chalo agnelli
24 de octubre de 1994
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